El grupo parlamentario de Eusko Alkartasuna es el promotor de la declaración que el Parlamento Vasco ha aprobado a favor del cierre definitivo de la central nuclear de Garoña. El Pleno de la Cámara aprueba la proposición no de ley presentada por EA, que reitera la oposición del Parlamento a que el Gobierno español pueda prorrogar la licencia de explotación de la planta burgalesa más allá del próximo 5 de julio, fecha en que caduca dicha licencia.
Gracias a la iniciativa de EA, el Parlamento Vasco instará al Gobierno español a que no renueve la licencia de explotación de la central de Garoña y proceda a su cierre definitivo, cumpliendo así los compromisos adquiridos por el PSOE y Rodríguez Zapatero durante las campañas electorales de 2004 y 2008. En este sentido, EA exige al presidente español que asuma su responsabilidad y cumpla la palabra dada, sin esconderse tras el informe emitido por el Consejo de Seguridad Nuclear, que avala la concesión de una prórroga de 10 años a la central nuclear para que siga funcionando hasta el año 2019.
Para EA sólo hay una salida posible y admisible: el cierre definitivo e inmediato de la central de Garoña, ya que hoy supone un grave peligro para la población; ni siquiera superaría los requisitos mínimos de seguridad que en la actualidad se exigen para poner en marcha una central nuclear. Para EA, garantizar la seguridad es la prioridad absoluta; por eso apostamos por sustituir la energía nuclear por energías renovables, limpias, seguras y menos costosas.
Gracias a la iniciativa de EA, el Parlamento Vasco instará al Gobierno español a que no renueve la licencia de explotación de la central de Garoña y proceda a su cierre definitivo, cumpliendo así los compromisos adquiridos por el PSOE y Rodríguez Zapatero durante las campañas electorales de 2004 y 2008. En este sentido, EA exige al presidente español que asuma su responsabilidad y cumpla la palabra dada, sin esconderse tras el informe emitido por el Consejo de Seguridad Nuclear, que avala la concesión de una prórroga de 10 años a la central nuclear para que siga funcionando hasta el año 2019.
Para EA sólo hay una salida posible y admisible: el cierre definitivo e inmediato de la central de Garoña, ya que hoy supone un grave peligro para la población; ni siquiera superaría los requisitos mínimos de seguridad que en la actualidad se exigen para poner en marcha una central nuclear. Para EA, garantizar la seguridad es la prioridad absoluta; por eso apostamos por sustituir la energía nuclear por energías renovables, limpias, seguras y menos costosas.
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